Un desdeñable ente aficionado, aparentemente, que intenta intercalar sonidos con música obteniendo inescuchables resultados para todos, pero a él no le importa demasiado ya que se dice que lo hace solo para fomentar su imaginación asociando los sonidos con nuevas imagenes. Así cuando su tedio por mezclar surge, entonces recrea pinturas digitales bajo el seudonimo ElectrodoAGE.